Comprender el impacto de una empresa desencadena un cambio significativo que permite mejorar las decisiones estratégicas y construir resiliencia a largo plazo.

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Sin importar su industria o tamaño, todas las empresas pueden conocer y gestionar su impacto utilizando las valiosas herramientas proporcionadas por el Movimiento B. Al obtener una comprensión más nítida de los datos de la empresa y su impacto de desempeño, se abre la puerta a decisiones más efectivas y a la posibilidad de impulsar un cambio social significativo. Por tanto, es imperativo entender a fondo qué implica el impacto y cómo una organización puede gestionar sus efectos, ya sean positivos o negativos, en beneficio de la sociedad y del planeta.

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¿Qué es el impacto?

De acuerdo con The Impact Management Platform, una colaboración de destacados proveedores de estándares de bienes públicos, el impacto se define como "un cambio en un aspecto del bienestar de las personas o en la condición del medio ambiente natural causado por una organización".

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Es innegable que toda empresa, en su funcionamiento, incide de alguna manera en la sociedad. Estas repercusiones pueden ser evaluadas como positivas o negativas. Por ejemplo, un impacto negativo podría surgir del uso de aceite de palma no sostenible, explotando la tierra y perjudicando a sus habitantes. Por otro lado, un impacto positivo podría derivar de la práctica de la agricultura regenerativa, que contribuye al aumento de la biodiversidad agrícola y a la restauración de la tierra.

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La gestión de impactos se vincula con la manera en que una empresa aborda estos efectos, tanto positivos como negativos, considerando todas las operaciones a lo largo de su cadena de valor.

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¿Por qué es importante medir y gestionar el impacto?

Para que las empresas tengan una licencia social para operar y creen valor compartido para todas las partes interesadas, es crucial medir y gestionar eficazmente su impacto social. Esto es cada vez más esperado tanto por los consumidores como por los colaboradores. 

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Al ser más conscientes de su poder adquisitivo, los clientes pueden boicotear marcas en un intento de influir en el cambio de prácticas de una empresa. Por otro lado, los colaboradores están buscando incorporar consideraciones ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) en sus áreas de trabajo, tal y como lo revela la Encuesta Global de Esperanzas y Miedos de la Fuerza Laboral 2022 de PwC.

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¿Cómo empezar a medir y gestionar el impacto?

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Para seguir siendo relevante en el mundo actual, las empresas deben mejorar continuamente su desempeño en impacto. Aquí hay cinco pasos para ayudar a comenzar:

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1. Herramientas y programas de gestión

El Movimiento B ofrece diversas herramientas y programas para ayudar a todas las empresas a medir y gestionar su impacto. La Evaluación de Impacto B es una herramienta de autoevaluación digital utilizada por más de 150,000 empresas en el mundo. Permite evaluar el desempeño en comparación con otras empresas y es el primer paso para obtener la Certificación B.

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El Movimiento B colaboró ​​con el Pacto Mundial de las Naciones Unidas para desarrollar SDG Action Manager, una solución única de gestión de impacto que puede ayudar a cada empresa a establecer objetivos, realizar un seguimiento del progreso y mantenerse motivado en acciones específicas para apoyar los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible.

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2. Identificar puntos de contacto clave 

Discuta el contenido de las herramientas y programas de evaluación de B Lab con colegas y determine contactos clave para medir el impacto. Trabaje con la alta dirección para comprender los objetivos de sostenibilidad existentes y las debilidades y riesgos de alto nivel. Esta información será crucial para determinar cuál de las herramientas y programas es mejor para su empresa.

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Es esencial colaborar estrechamente con la alta dirección para comprender los objetivos de sostenibilidad ya establecidos o identificar las debilidades y riesgos de alto nivel. Esta información se convertirá en un recurso invaluable para determinar cuál de las herramientas y programas ofrecidos se adapta mejor a las necesidades específicas de su empresa.

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3. Registro 

Al conformar un equipo encargado de recopilar datos y abordar las preguntas de evaluación, es momento de iniciar con el registro de la empresa en una de estas herramientas, o bien, al programa B Movement Builders. 

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4. Establecer el punto de partida

Para iniciar el proceso, será necesario ingresar los datos que la organización ha estado monitoreando en la Evaluación de Impacto B o en el SDG Action Manager. Este primer paso proporcionará una comprensión más profunda de las áreas de riesgo que necesitan mejoras y aquellas donde ya se está generando un impacto positivo.

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5. Establecer objetivos de mejora

La empresa puede aprovechar las funciones de evaluación comparativa para entender cómo se compara con el desempeño de la industria, empresas de tamaño similar o incluso a nivel regional. A partir de ello, se pueden establecer objetivos con plazos definidos para mejorar su desempeño en áreas de riesgo.

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Generar un impacto real requiere tiempo y esfuerzo, pero las empresas que lideran el cambio hacia sistemas económicos sostenibles obtienen beneficios notables. Las Empresas B generan confianza, atraen y retienen talento, y atraen inversores alineados con su misión. 

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Al someterse al proceso de verificación cada tres años, también se centran en la mejora continua, lo que conduce a la resiliencia a largo plazo. El compromiso con la sostenibilidad a largo plazo sobre los beneficios a corto plazo es esencial para el éxito continuo en un mundo que demanda un cambio significativo.

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Podrás encontrar la versión original de este artículo en el siguiente enlace: 5 Steps to Measure and Manage Company Impact

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